Como manda la tradición y el orden estacional de Dos Hermanas, el cierre de la Semana Santa lo llevo a cabo la Hermandad del Santo Entierro. A las 7 de la tarde ponía su cruz de guía en la puerta de Santa María Magdalena, los nazarenos de ruán negro de la Soledad. La sobriedad, seneridad y el luto invadieron las calles nazarenas, a la vez que el muñidor nos transportaba a épocas pasadas, anunciando el santo entierro de nuestro señor jesucristo. A los pocos minutos la hornacina del santo sepulcro salía a las calles de Dos Hermanas acompañado como siempre por un trio de música de capilla. Su exorno floral, iris morados. Sin problematica climatológica, sin gente que sobra ni gente que falta, la hermandad recorrio las calles de la ciudad colocando un broche que no final a la Semana Santa de 2010.
Con un toque clasicista y una nueva disposición de la candelería, así como de las jarrillas florales, realizo su estación de penitencia Ntra.Sra. de la Soledad. Con su característico palio de cajón en terciopelo negro, clavel blanco en posposición cónica y cera blanca con el sello de la hermandad, acompañada por la extraordinaria banda del Maestro Tejera, la señora del sábado santo nos embriago del toque mas personal, sencillo y elegante de las dolorosas de la ciudad. Con un tocado muy acertado, que acentuaba más aun si cabe su hermosisima belleza nos dejo con momentos muy emotivos, como su paso por la capilla de Vera-Cruz o el recorrer centrico de los pasos de esta cofradía. Sin una sola pega, más que la mística relación entre esta cofradia y la sociedad, desde este blog os invito a conocer la verdadera raíz de esta hermandad, su infinita labor ejemplar que nos deja, no solo el sábado santo, sino durante la cuaresma, cultos y durante todo el año, unas de las mejores estampas cofrades de esta bendita ciudad, colmando de buen hacer cada uno de sus cultos públicos. Felicidades.
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